Bestiario digital No. 7

Yo vengo de familia revolucionaria y acomodada, acomodada en Kholy, mucho mejor que acomodada en Siboney en tanto es mejor para alquilar en AirBnB (cuando se vuelva a poder). Mi abuelo fue luchador clandestino, eso me dijo él, y como nadie lo vio luchar debe haber sido un buen clandestino. Eso le sirvió para ascender, que no el Turquino, sino las escaleras ministeriales, y desde su altura alzó a mi padre, yo de ellos aprendí y también soy un buen escalador.

Mi papá llegó a Embajador en los países hermanos del campo socialista, la forma más sofisticada e internacionalista de botella. Yo lo acompañé y vi desde mi ventana cómo caía la URSS con los tanques intentando salvar el socialismo. A mí eso no me gustó… lo de los tanques, claro, porque a mí siempre el verdeolivo me ha quedado feo.

Al principio yo era experto en ONG y Sociedad Civil, me conocía todas las embajadas escandinavas como vikingo a los fiordos o rata al queso suizo. Pero la COSUDE es una sola y nosotros éramos muchos, y además, yo no tenía las dotes de cineastas para que me dieran premios para pagarme las películas para después censurármelas. Luego llegó mi hermano con su rosa blanca y me di cuenta que lo mío era ser empresario, como nunca me dio para ser intelectual sería un emprendedor orgánico, que suena más bonito e intelectual. Ya mi papá se encargaría de buscarme una empresa. Siempre podría cobrar algunos favores a otros papás y que me encargaran algunas de sus perlas.

Si México tiene la Cuarta Transformación, yo tendría La Quinta. Sociedad de Responsabilidad Limitada, que tampoco hay que venirse arriba y pasarse de la raya, eso es mortal, la causa uno y dos para perder la cabeza. Para sobrevivir aquí hay que flotar, no levantar mucho la cabeza y jugar con la cadena y no con el mono. Y sobre todo no dejar que los monos jueguen, que luego se quieren hacer los dueños de La Finca.

Lo mío es construir el sociolismo con características cubanas, no ser un gil. Esto no se parece en nada en construir el socialismo con características chinas, porque ellos sí lo están construyendo, lo mío es más de afilar las armas. Lo primero es coger una empresa estatal, le limito la responsabilidad y mágicamente estamos generando ganancias. Que sea a costa de subir 10 veces los precios no tiene nada que ver. Un día me anuncio en Cubadebate y al siguiente en CiberCuba, en total, son la misma m…ultimedia. Y de paso mantengo contento a los que me regalaron la empresa (que leen Cubadebate) y a los que consumen lo que vendo (que leen CiberCuba).

Pero emprender una vez está bien, emprender dos veces está muy bien, pero ser un emprendedor orgánico, eso es solo para los imprescindibles. El emprendedor orgánico nunca explota, cuando más se esfuma como el tabaco de Cuba. Tiene aires intelectuales, aunque nunca haya leído un libro. Y nunca estudió economía aunque dirija una empresa. Porque el emprendedor orgánico viene dado por la gracia divina, estar cerca para ser ungido, pero nunca tan cerca para quemarse.

Yo lo sé porque soy uno de ellos… hasta que me llegue el parole.

Entonces seré un gusano orgánico.


Bestiario digital

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